Me encanta ir a ver el mar cuando esta cabreado. Me gusta ver las olas romper. Lo mejor es ver toda esa agua transparente convertirse en espuma blanca y fondo verde o azul profundo. La verdad es que hace mucho que no me baño en el mar y lo echo de menos. A ver si este año puedo ir, pero cuando esté menos enfadado. Me encanta La Manga en invierno, sin nadie molestando y con el mar furioso con esta estrecha franja de tierra que le impide llegar mas allá, donde habita su hermano menor.
Muy bonita la imagen del mar "cabreado", pero a mi también me gusta el mar en calma, cuando se refleja el sol en el agua y está tan limpia y transparente que ves los pececitos nadar en el fondo. La mejor época para mí es esta, la primavera, se disfruta del buen tiempo sin las aglomeraciones del verano. Un lujo paradisíaco sólo para tus ojos. Un saludo
ResponderEliminarTenéis mucha suerte los que vivís por el litoral. El hecho de tener tan cerca el mar es un lujo. Poder acercarte de vez en cuando para contemplarlo, relajarte, pensar...., y no digamos cuando hace buen tiempo y duermes con la ventana abierta oyendo las olas...
ResponderEliminarEl tener el portátil y poder escribir el blog mirando el mar desde la playa, tirado en una toalla...
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